HIPERQUERATOSIS o DUREZAS
Con el término hiperqueratosis (más conocido por durezas) nos referimos al engrosamiento de la piel, compuesto por células muertas en zonas de fuerte roce, fricción o presión.
Las más frecuentes son las hiperqueratosis plantares que aparecen en la planta del pie, en la zona del antepié, como resultado de una sobrecarga continuada.
Éstas, a su vez, pueden ser de tres tipos:
- Puntuales: en alguna de las cabezas metatarsales debido a un metatarsiano más largo o asociadas a dedos en garra
- Generalizadas: en las cabezas metatarsales centrales asociadas a patologías como hallux valgus (juanetetes), pies cavos, etc.
- De talón: menos frecuentes, son debidas a la sobrecarga o apoyo excesivo del talón. La falta de una adecuada hidratación es una de las causas fundamentales de su aparición, y lo que en un principio es simplemente una acumulación de queratina, con el tiempo y la falta de cuidados adecuados puede abocar en la formación de grietas profundas, dolorosas y de difícil curación.
HELOMAS o CALLOS
Con la terminología científica de HELOMA, (más conocido como callo) del griego helos, clavo y oma, tumor, nos referimos al acumulo de queratina, (en la capa cornea de la epidermis) en zonas muy circunscritas.
El heloma se manifiesta como una superficie queratósica, de bordes circunscritos bien delimitados, es una masa seca cornea y dura, amarillenta o blanco-amarillenta, en el centro de la masa córnea en ocasiones aparece un núcleo duro, también coloquialmente llamado “clavo” de coloración más pálida, que se introduce hacia tejidos subepidérmicos.
La causa de la aparición de los helomas o callos es la presión o fricción anormal de forma continua contra la piel del dedo contiguo o contra la piel del calzado, como norma general debido a:
- Calzado estrecho o mal ajustado.
- Prominencias óseas, bordes óseos irregulares, exóstosis o defectos de alineación de los dedos, o una función y estructura alterada del pie.
UÑAS ENCARNADAS
Una uña encarnada se identifica por el enrojecimiento e inflamación de la parte blanda del dedo en la zona circundante de la uña.. En numerosas ocasiones aparece infección y sin tratamiento,
a la infección le seguirá un mamelón hipertrófico, o formación de un bulto de carne alrededor de la uña.
DERMATOMICOSIS O MICOSIS DE LA PIEL
Son infecciones por hongos. Los hongos colonizan fácilmente ambientes húmedos y cálidos, condiciones que se dan el el interior de calzados con poca transpiración y con piés sudorosos. Se trasmiten habitualmente desde zonas húmedas como vestuarios, piscinas, duchas, de ahí la importancia de no ir nunca descalzo en esas zonas. También se trasmiten al compartir calzado o toallas, incluso cortauñas. o a través de esporas que han llegado al suelo. Son muy contagiosos.
Al menos el 60 por ciento de personas que acuden regularmente a centros deportivos, piscinas o gimnasios ha sufrido alguna vez pie de atleta o infección por hongos. Los síntomas de una micosis podal se notan en la piel, que se vuelve escamosa, enrojecida, con presencia de ampollitas y picor, presentando frecuentemente además olor desagradable.
ONICOMICOSIS O MICOSIS UNGUEALES
Son infecciones por hongos en las uñas. Éstas aparecen con una tonalidad amarillenta o blanquecina, normalmente van alterando su forma y en los casos más evolucionados pueden presentar un aspecto totalmente engrosado y deforme.
PAPILOMAS
Es una infección vírica, comúnmente llamada verruga plantar. Las verrugas no se suelen detectar de forma inmediata, pasando unos meses desde su contagio hasta su manifestación en la piel. Su rascarlo y manipulado, al pensar que es una dureza o un heloma, puede provocar su extensión a otras zonas de la piel. Es por tanto necesario tratarlo tempranamente, ya que estas verrugas aumentan su tamaño y su molestia.
Se trasmite al pisar ambientes o zonas húmedas con presencia de estos virus, como son las piscinas y duchas de gimnasios. Suele aparecer en momentos con bajas defensas anímicas e inmunitarias del organismo. Es necesario secarse bien los pies, usar su propia toalla y evitar en la medida posible pisar descalzo las zonas encharcadas.
Hay personas que se tratan ellas mismas estas verrugas al haber todo un historial de remedios caseros que han pasado de generación en generación, pero es recomendable la visita al podólogo, que tiene una serie de técnicas específicas para eliminarlas. Los más habituales tratarlas mediante aplicaciones de algún ácido, como el nítrico, o cáusticos, como la Cantaridina, pero también puede tratarse con crioterapia, homeopatía e incluso mediante una pequeña cirugía.
-Pies planos: afección que se caracteriza por una falta de arco longitudinal plantar.
-Pies cavos: afección que se caracteriza por un exceso de arco longitudinal plantar.
-Talalgias: dolor en el/los talones provocado por diferentes afecciones tales como tendinitis del tendón de Aquiles, espolón calcáneo, etc.
-Metatarsalgias: dolor en las cabezas metatarsales normamente debido a sobrecargas en esa zona.
-Fascitis plantar.: inflamación aguda de la aponeurosis plantar del pie.